¿Quién es este señor que vive conmigo?

...Quién es? Es una pregunta que me hago cada día... porque cada día me sorprendo más y más... y no soy quién para juzgar, sólo Dios tiene la potestad de hacerlo. Viví mi niñez, mi adolescencia, hasta hoy sin preocupaciones, dedicada a estudiar, a trabajar, hacerme mujer... lo que soy hoy en día. Pero vacía del afecto y presencia de la figura paterna... lo que soy se lo debo a mi mami que ya partió, la familia que tengo se lo debo a ella, quién nos inculcó siempre la doctrina de vivir en armonía entre hermanos, sin odios, sin competencia para saber quién es mejor, sin envidias, sin celos... a ti madre que siempre velastes por nosotros te dedico estás lineas y te doy gracias por haberme educado siempre con la convicción de un Dios por delante.
Hoy el panorama es otro... un ambiente que desconozco y que sin embargo acepto hasta que Dios disponga... y me aferro a mis hermanos, a mis amigos, a mis creencias.
Y le pido a Dios se dé el milagro del cambio para el bien de él, que su alma se inunde con la luz del Creador... que de su boca no salga tanto veneno, tanto odio y tanta inconformidad.
Yo sigo mi camino... esta etapa de mi vida es una lección... para ser mejor persona y el mensaje lo percibí y lo acato.